Un nuevo esquema de cobranza al sistema pretende poner en jaque a los independientes en España
El régimen tributario en España tiende a ir al alza con la nueva propuesta del Ministerio de la seguridad social. En el se busca que los autónomos tripliquen sus aportes en un margen de ganancias que vaya más allá de los 3.000 euros. Estos aumentos a las cuotas tiene un déficit gigante según denuncia la Federación nacional de asociaciones autónomos, en donde se va a paliar4 bastante el nivel de ganancias para entregar en el aporte trimestral cerca de 1.000 euros.
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La relación de entre lo que se aporta hoy y la propuesta del ejecutivo es desproporcionada. Al tiempo señalan que este ejercicio que iniciaría en 2023 y se extendería hasta 2031 es ampliamente absurda, ya que de una u otra manera salpica a los autónomos que ganan menos, y que están clasificados en otro grupo. En ese caso tributarán en orden a los 728 euros que es en porcentaje, más del doble, un 150% adicional que va en contra de las mareas habituales de gestión del marco económico en el país.
Pero sin duda el peor error constatado allí según el agrupado de autónomos, es que El Ejecutivo no piensa tener en cuenta los gastos que no están siendo deducibles fiscalmente de los autónomos. Lo que constituye un desequilibrio y pretendiendo ser un sistema más equitativo cae en el error de ser un sistema desproporcionado y muy inclinado para el gobierno. Un problema de fondo, que miembros del gobierno han dicho reducir a escala esos golpes al incluir una reducción en demandas de dos de cada tres autónomos.
Una propuesta esperanzadora pretende reducir el verdadero impacto de estas decisiones
Por otro lado la organización UPTA ha propuesto reducir ese golpe tan certero para simplificar los tramos. Eso quiere decir que se van a ir hasta la mitad, quedando entre 6 y 7, que es mucho más estable y conveniente. Por lo pronto las decisiones parecen tomadas y se espera que el derivado se vaya inclinado solo a las ganancias en poder adquisitivo mayores. Eso implica ganancias por encima de los 6.000 euros, manteniendo la base tal como está para no alterar nada por ahora.
Todo este escándalo se mantiene vigente y de momento solo salen a relucir acciones derivadas como la reducción a los plazos fijados del régimen transitorio ya que los autónomos que menores ingresos demuestran no pueden esperar más de 9 años creyendo que las modificaciones justas se ejecuten para ellos poder ajustarse a una cuota realmente sensata.
