El milagro español con el SMI

Para el sector empresarial parece ser una cifra complicada aunque pare el restante implique una mejora considerable en su proyecto de vida

Desde que Pedro Sánchez está en el poder, España registra la carrera más evolutiva registrada antes en cuanto al SMI. El concepto de salario mínimo interprofesional ha elevado sus valores en hasta un 36%, y lo por de todo no es eso sino que la indicación sigue al alza. Así lo han dejado ver los departamentos financieros que comandan la nación, que dejan ver que inclusive en algunos sectores este fenómeno supera el salario regular promedio, dependiendo la comunidad autónoma donde se ejemplifique este caso.

Tal elevación llevan a España a entrar en tremendas disyuntivas y luchas que incluyen al sector empresarial y al sector trabajador. Por un lado está la preocupación abierta por el cambio de sistema impuesto en la reforma laboral, donde ni siquiera se contemplan los contratos provisionales o a corto plazo, y se regulariza un estándar de precio pagado que va por encima de los 1000 euros. Ese valor es en muchas partes superior al salario promedio, generando altos índices de crisis para la industrias.

De hecho con esta cifra España escala hasta la tercera casilla de toda la Unión Europea, dejando bien parado este concepto, pero abriendo la brecha respecto a la situación económica actual. Esa imposición en la Moncloa luego del veto a Mariano Rajoy ha resultado ser un boom, que desde luego favorece al sector trabajador que ha visto mejorado en todo sentido su proyección de vida, aumentando el mínimo vital y extendiendo las ayudas de forma sustantiva.

Pedro Sánchez pone en contexto una vez más la elevación del SMI en España

El pago podría sufrir otro incremento de cara al segundo semestre de 2022

Ya la actualización está vigente y contra ello parece que poco se puede hacer. Pero si el sector industrial estaba preocupado, ahora tendría muchos más motivos. Se dice que antes del cierre del segundo semestre de 2022 este valor podría llegar hasta los 1049 euros netos. Lo que eleva ese índice y pone en jaque mucho más a los que ya han sentado una voz de protesta.

Parece que Pedro Sánchez no va a descansar hasta nivelar lo que en su consciente está marcado como regular. Dejando un campo abonado a futuras administraciones y haciendo prevalecer los derechos de los que día a día ponen su espalda para mejorar la economía de este país. Eso sí, aún se tienen que poner en contexto los valores por comunidad, pues la gravedad puede ser menor o peor según de dónde se mire y analice el campo.