Desamparados por sus bancos: Cuentas cerradas sin previo aviso

Los clientes enfrentan cierres de cuentas inesperados y sin explicaciones a medida que los bancos luchan contra actividades sospechosas

Un aumento en los informes de actividad sospechosa

La pandemia ha visto un aumento en las actividades fraudulentas, lo que ha llevado a los bancos a examinar más de cerca las transacciones de sus clientes. Las instituciones financieras están obligadas a informar a las autoridades y a los reguladores de cualquier actividad irregular que no puedan explicar fácilmente. En 2021, se presentaron 1,4 millones de estos informes, un 70% más que en 2014.

Varios factores pueden estar detrás del aumento en los informes de actividad sospechosa, como más alertas de funcionarios gubernamentales, tecnologías cada vez más sofisticadas para detectar actividades sospechosas y un mayor escrutinio regulatorio.

Sin embargo, la mayoría de las veces, los clientes probablemente sean inocentes. Un estudio de 2018 del Bank Policy Institute encontró que solo el 4% de 640.000 informes de un grupo de grandes bancos justificaron un seguimiento por parte de las fuerzas del orden.

Explicaciones vagas y cierres de cuentas inesperados

Los clientes a menudo se ven sorprendidos por los cierres de cuentas, ya que los bancos no proporcionan razones específicas para sus acciones. Esta falta de transparencia puede dejar a los clientes sintiéndose frustrados y desamparados.

Los bancos pueden cerrar una cuenta por cualquier motivo y en cualquier momento, una política que generalmente está enterrada en la letra pequeña de sus acuerdos con los clientes. El cierre de cuentas suele ser un último recurso para proteger al banco y al cliente de un posible fraude.

Un delicado equilibrio

Los bancos deben equilibrar sus esfuerzos por combatir el fraude con la necesidad de mantener la satisfacción del cliente y evitar alienar a las comunidades de inmigrantes y a aquellos que pueden tener dificultades para obtener cuentas bancarias tradicionales. Además, los bancos también deben rendir cuentas ante sus propios accionistas y mantener a sus clientes satisfechos y rentables.

Sin embargo, los cierres de cuentas repentinos pueden ser muy perturbadores para los clientes. El número de quejas relacionadas con el cierre de cuentas corrientes y de ahorro ha aumentado significativamente en los últimos años.

¿Qué pueden hacer los clientes?

Los clientes pueden considerar diversificar sus cuentas bancarias y mantener cuentas separadas para diferentes propósitos, lo que puede ser útil en caso de que un banco cierre una cuenta sin previo aviso. Además, es aconsejable mantener una comunicación abierta con su banco sobre cualquier cambio en su vida financiera que pueda parecer sospechoso para un algoritmo de detección de fraude.

Sin embargo, para muchos clientes, el daño ya está hecho y la falta de respuestas satisfactorias por parte de los bancos solo agrava su frustración y preocupación por su futuro financiero.