Bruselas avanza hacia una fiscalidad comunitaria unificada para grandes multinacionales

Bruselas ha reafirmado su determinación de instaurar una fiscalidad más justa y equitativa en el seno de la Unión Europea (UE). Con esta premisa, la Comisión Europea ha introducido una propuesta encaminada a homogeneizar el cálculo del impuesto de sociedades, centrando sus esfuerzos en las grandes multinacionales con ingresos que superan los 750 millones de euros.

Un Impuesto Común para Fortalecer la Unión

El contexto de la propuesta

El afán de establecer normativas fiscales comunes no es nuevo en Bruselas. Sin embargo, este tercer intento viene acompañado de un renovado impulso, motivado por la necesidad de impedir el ‘dumping’ fiscal. Países como Holanda, Luxemburgo o Irlanda han sido señalados en el pasado por permitir ventajas fiscales que distorsionan la competencia.

Lo que propone Bruselas

El corazón de la propuesta radica en una fórmula única de cálculo de la base imponible. Esta normativa no busca alterar los tipos impositivos que cada Estado miembro decide, sino más bien estandarizar cómo se calcula el impuesto a nivel comunitario.

La Visión del BEFIT

Un nuevo marco fiscal

El BEFIT (Base Erosion and Profit Shifting, por sus siglas en inglés) representa este nuevo enfoque de Bruselas. Paolo Gentiloni, comisario de Economía, ha resaltado que el BEFIT es una herramienta que simplificará los procedimientos fiscales, beneficiando tanto a las empresas como a las autoridades nacionales.

¿Cómo funcionará?

En esencia, el BEFIT busca agregar las bases imponibles de todas las empresas de un mismo grupo. Posteriormente, cada una de estas empresas tributará en su país de residencia una proporción de esta base imponible común. El cálculo de esta proporción se derivará de la media de resultados obtenidos en los tres ejercicios fiscales previos.

Más Allá del Impuesto de Sociedades

Armonización en la transferencia de precios

Otro aspecto relevante es la armonización de las normas sobre transferencia de precios entre empresas asociadas. Esta propuesta busca, en términos sencillos, garantizar que el precio establecido en transacciones entre empresas del mismo grupo sea justo y acorde al mercado.

Protección a las pymes

Bruselas también ha abogado por mejorar las condiciones de pago a las pequeñas y medianas empresas (pymes). Estableciendo un plazo máximo de 30 días para el pago de operaciones comerciales, la Comisión busca proteger a las pymes de plazos de pago abusivos y prolongados.

Hacia Un Futuro Fiscal Más Justo

El camino hacia una fiscalidad unificada y justa es complejo, y Bruselas es consciente de ello. Sin embargo, estas propuestas representan pasos firmes en la dirección correcta. Es esencial que la UE opere como un bloque unificado, y la fiscalidad es un pilar fundamental en esta visión.