La alta demanda de poseedores de la moneda digital ha permitido que países se integren y abran sus puertas para tener un mejor sistema de uso y control
Con el avance del tiempo en el mundo digital y financiero va creciendo una especie de comunidad llamada Bitcoiners, también llamados familia Bitcoin cuyo único objetivo es manejar, pagar y establecer un ideal de vida con el solo uso de esta moneda. Pues bien, en ese punto existen varias problemáticas, pero sin duda la más importante es la restricción de los países en estado de gobierno por la regulación misma. Eso quiere decir que hay muchas leyes que impiden su libre comercio, o que emiten trabas a partir de sus custodias de la moneda de mando.
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Ahora bien, en ese sentido Portugal ha querido dar un paso al frente, al proclamarse refugio para los Bitcoiners, un sitio en donde se puede vivir usando esta moneda sin problema alguno. Es una especie de Suiza con el euro y el dólar, pero con un clima mucho más agradable, un ritmo de vida menos acelerado y calidad al 100%. Muchos se preguntarán ¿Por qué sucede esto?, y la respuesta es muy simple, y es que para Portugal el Bitcoin no es considerada una moneda, y al no ser moneda no tienen curso legal y por tanto no tributan. Un país sin impuestos y gastando de hecho al mismo ritmo.
Eso ha hecho que familias enteras que se han dedicado a realizar inversiones en este tipo de negocio hoy puedan gozar en Portugal, con libertad e integración que da una parte del sector económico y comercial que ya se va abriendo paso. Inclusive hay muchas especulaciones que existen ya comunidades enteras de Bitcoiners viviendo en Portugal, lo hacen de forma anónima y permiten realizar inversiones en construcción y muchos elementos más.
No hay mucho indicio que lo vayan a legalizar y el estado ha ido apoyando esa idea
Aparte de todo, y por fortuna para los que le han empezado a ver con mucho agrado, el estado sigue permeando este tipo de usos sin preocupaciones. No hay mucho optimismo que a corto plazo le adopten como moneda como sucede en países como El Salvador y eso es garantía para las familias que ya han tomado la decisión por apostar por este país. Valoran y favorecen la evolución digital y están permitiendo que se active esa parte de la economía que parece tener mucho poder ahora mismo.
Por si fuera poco, tan solo en este país existen ya 57 sitios comerciales que aceptan detallado sus pagos con Bitcoin, y además, sistemas de servicios públicos como facturas de la energía se pueden pagar con este servicio. Todo un avance que va dando una muestra de desviación que a muchos parece interesarles. Veremos en qué medida termina ejecutándose todo, y si finalmente sigue ganando adeptos como hasta ahora.
