Organizaciones ecologistas califican al nuevo diésel renovable de Repsol como ineficiente

Inicio prometedor, cuestionamientos posteriores

Repsol celebró en mayo la inauguración de las primeras tres gasolineras en España que ofrecen “combustible renovable 100 %”, un logro significativo, según la compañía, dado que este combustible podría utilizarse en vehículos actuales sin necesidad de modificar los motores ni las infraestructuras de distribución y repostaje. Sin embargo, organizaciones ecologistas califican a este combustible como «ineficiente».

Repsol indicó en su comunicado que los biocombustibles avanzados se fabrican a partir de residuos orgánicos no destinados a la alimentación. Mientras tanto, los combustibles sintéticos se obtienen a partir de CO2 capturado e hidrógeno renovable. No obstante, se critica que el proceso de producción no es sencillo, barato ni totalmente limpio.

Diésel renovable en Repsol

Los detalles del e-diésel y su eficiencia

Francisco del Pozo, experto en combustibles fósiles de Greenpeace, expresó su escepticismo hacia el combustible y el anuncio de Repsol. Explicó que actualmente existen diferentes tipos de combustibles que capturan el CO2 de la atmósfera o que se generan a través de otros procesos. Según Del Pozo, es probable que Repsol se refiera al e-diésel, obtenido del hidrógeno mezclado en procesos industriales complejos.

El biodiésel y el e-diésel sintético, según Del Pozo, «tienen una huella climática» que variará dependiendo del proceso de captación de materias primas. En el mejor de los casos, el e-diésel se obtendrá de hidrógeno verde y CO2 capturado de la atmósfera, pero estos casos serán escasos. Además, estos combustibles requieren mucha energía y son muy ineficientes.

¿Es el e-diésel la última esperanza de la industria automovilística?

Del Pozo estima que de cada 100 unidades de energía requeridas para la generación de estos combustibles, solo aproximadamente 25 o 30 sirven para mover el motor. Por ello, argumenta que poner baterías sería mucho más eficaz y cree que el diésel renovable no será la panacea que algunos promocionan. La transición energética debe ser una transición de eficiencia, por lo que se reservará para usos no electrificables.

A pesar de su eficiencia cuestionada, algunos actores de la industria ven al e-diésel como una tabla de salvación. Aunque a partir de 2035 estará prohibida en la UE la venta de coches nuevos con motores térmicos, los vehículos de combustibles sintéticos sí se podrán matricular. Del Pozo opina que la industria automovilística quiere mantener su modelo de negocio y obtener fondos de la UE, produciendo combustibles de cualquier tipo. Así, la moratoria de la prohibición de coches de combustión hasta 2035 sería una gran victoria para ellos.