La avaricia en los precios (greedflation) puede reventar el sistema capitalista

La tendencia preocupante de márgenes de beneficio récord en medio de la inflación lleva a un economista a proponer soluciones controvertidas

En teoría, cuando los costos aumentan, las ganancias deberían disminuir. Sin embargo, recientemente se ha observado una tendencia contraria: a pesar de la inflación persistente, las corporaciones siguen obteniendo ganancias récord. El año pasado, las empresas del Fortune 500 generaron un máximo histórico de 1,8 billones de dólares en beneficios, con 16,1 billones de dólares en ingresos. Esta situación ha llevado a expertos y políticos a plantear preocupaciones sobre el fenómeno llamado «Greedflation» (inflación por avaricia).

Greedflation: un fenómeno sin precedentes en la economía actual

Albert Edwards, estratega global del banco Société Générale, ha publicado una nota crítica sobre el Greedflation. Según Edwards, las corporaciones, especialmente en economías desarrolladas como EE. UU. y Reino Unido, han utilizado el aumento en los costos de las materias primas durante la pandemia y la guerra en Ucrania como «excusa» para subir los precios y expandir los márgenes de beneficio a nuevos niveles.

Edwards afirma que en sus cuatro décadas trabajando en finanzas, nunca había visto niveles tan «sin precedentes» y «asombrosos» de Greedflation en un ciclo económico. Un estudio de enero del Banco de la Reserva Federal de Kansas City respalda su punto, al encontrar que el crecimiento del margen (la relación entre el precio que una empresa cobra y su costo de producción) fue un factor mucho más importante en la inflación de 2021 que en cualquier otro momento de la historia económica.

¿El fin del capitalismo?

El estratega teme que los «márgenes de beneficio súper normales» de las corporaciones en EE. UU. y otros países puedan eventualmente «inflamar disturbios sociales» si los consumidores continúan luchando contra la inflación. Edwards advierte: «El fin de Greedflation debe llegar seguramente. De lo contrario, podríamos estar presenciando el fin del capitalismo. Este es un gran problema para los formuladores de políticas que simplemente no puede ser ignorado por más tiempo».

Control de precios: ¿una solución controvertida al Greedflation?

Edwards propone una solución polémica para frenar el Greedflation, que refleja su «debilitada confianza» en el sistema capitalista: los controles de precios. Esta medida, que implica que el gobierno establezca los precios que las empresas pueden cobrar a los consumidores, ha sido criticada a lo largo de la historia, desde el colapso del primer Imperio Babilónico en 1595 a.C. hasta las largas colas en las gasolineras durante las administraciones de Nixon y Carter en los años 70.

A pesar de la opinión negativa que muchos tienen de los controles de precios, Edwards argumenta que su uso podría estar justificado porque «algo parece haberse roto en el capitalismo». El estratega hace referencia a un artículo de los economistas Isabella Weber y Evan Wasner de la Universidad de Massachusetts Amherst, titulado «Sellers’ Inflation, Profits and Conflict: Why Can Large Firms Hike Prices in an Emergency?». En este documento, se descubrió que las corporaciones incurrieron en prácticas de «acaparamiento de precios» durante la pandemia, y se argumentó que los controles de precios temporales podrían ser la única forma de prevenir las «espirales inflacionarias» que podrían resultar de este comportamiento.

Según Edwards, «al analizar sus conclusiones sobre cómo lidiar con Greedflation, los controles de precios parecen surgir como un método favorito de control». Si bien esta propuesta es controvertida, el hecho de que un economista de un banco de inversión de renombre mundial la respalde podría llevar este debate desde los márgenes progresistas al ámbito principal.

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