La cadena de comida rápida se encuentra en el ojo del huracán por las malas condiciones con sus trabajadores
En el seno de Telepizza queda poco rastro de la alegría con que se acogió hace tan solo dos años y medio la alianza firmada con Pizza Hut. Con aquel movimiento, parecía allanar el camino para hacer del grupo español de restauración una compañía con mayor proyección internacional y un perfil de crecimiento más atractivo.
Unas expectativas que el mercado nunca llegó a reconocerle, y que ahora son todo problemas. Especialmente en lo que tienen que ver con el trato con sus empleados. Nos referimos a la denuncia que una trabajadora de la misma Telepizza evidenció en las redes esclareciendo lo ocurrido en la pasada Nochebuena.
Cierran un establecimiento de telepizza en vísperas de Navidad y con ello la salida de sus trabajadores
Todo viene marcado directamente por la situación que vivimos. No obstante, estos empleados se encontraron con la noticia de que cerraban uno de sus establecimientos un día antes de la víspera de Navidad. En este caso hablamos de la que está ubicada en Alicante.
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A tenor de que fue de las pocas empresas que no cerró durante el confiamiento, los empleados de algunas tiendas que estaban situadas en centros comerciales pasaron a reubicarse en otros espacios y situaciones. La primera gran denuncia de esta trabajadora (como añadiremos posteriormente) es que lo hicieron cobrando lo mismo (sin llegar al salario mínimo) y sin ningún tipo de compensación.
Lo que evidenció un fuerte entramado para Telepizza. Al respecto, pasó poco tiempo hasta que estos empleados volvieron a sus ubicaciones de origen… pero los números de ventas nunca llegaron a sus pretensiones. De hecho, cayeron a los peores meses pre-covid. Esto hizo que la ubicada en Alicante tuviera que tomar medidas.
Allí, como se conoció posteriormente, todas las tiendas de Telepizza pasarían a ser parte se un franquiciado… salvo las de Alicante, de la cual denuncia estos hechos. Es entonces cuando los dueños de Telepizza notifican a sus trabajadores que cerrarían este locale y que, o bien eran destinados a Elche, a 27 km y por un sueldo de 190 euros netos por 35 horas diarias, o darles la baja voluntaria, sin derecho a paro ni finiquito.
Telepizza ofrece la alternativa de destino a 27 km y un sueldo de 190 euros netos
Como ocurre con la denunciante, muchos no pueden situarse a la de Elche por el principal motivo de que deberían cambiarse de residencia, por lo que prácticamente les obligan a renunciar al puesto. En su caso, los trabajadores de este establecimiento de Alicante solicitan una indemnización de 20 días por año trabajado, como marca el Estatuto de Trabajadores, y un derecho a paro «por no poder donde Telepizza nos reubica», ha señalado la afectada.
Una realidad, obviamente, condicionada por el impacto de una crisis, la del coronavirus, que además ha dejado una honda huella en las cuentas del grupo pizzero, que cerró los nueve primeros meses con pérdidas de 43,6 millones de euros, tras sufrir un recorte del 12% de la facturación (o del 21% si se incluyen las franquicias).
